David contra Goliat. El heroico Kormoran abre fuego contra el crucero Sydney.
Camaradas,
El buque corsario alemán también conocido como crucero auxiliar HSK Kormoran y el crucero ligero australiano HMAS Sydney se han enfrentado a 200 kilómetros de Carnarvon, Australia Occidental. El Kormoran enarbolaba bandera holandesa y navegaba bajo el nombre Streat Malakha cuando se ha encontrado con el crucero australiano que regresaba del Estrecho de Sunda tras escoltar al transporte de tropas Zelandia. No ha sido hasta que los buques se han situado a menos de dos kilómetros de distancia el uno del otro que el Kormoran ha izado la bandera con la esvástica y ha abierto fuego.
Una representación del desigual combate, todo un símbolo del valor y de la fidelidad del soldado alemán.
El crucero Sydney es un buque muy superior al alemán, tanto en armamento como en blindaje, por lo que la única oportunidad del bravo Kormoran se basa en sorprenderlo. La primera andanada ha alcanzado de pleno al buque de guerra australiano, averiando gravemente su puente y su torre directora de artillería, inundando los depósitos de municiones y provocando que la potencia de fuego del Sydney se haya visto reducida a la mitad. Sin embargo, aun reducida a la mitad, la artillería del HMAS Sydney continúa siendo muy superior a la del Kormoran. Durante la siguiente media hora se ha producido un brutal intercambio de fuego. El Kormoran, agujereado como un colador y gravemente dañado, ha terminado hundiéndose.
Así ha terminado el crucero del buque corsario Kormoran, que en su prolífico crucero ha conseguido mandar a pique a 11 buques con un total de 68.300 toneladas de registro bruto. 320 miembros de su tripulación han sobrevivido para contar la historia, habiendo perdido la vida 78 marineros, 20 de ellos durante el combate y el resto cuando un bote salvavidas ha volcado.
Los supervivientes del Kormoran han informado que, un par de horas después de su hundimiento, después de que el crucero HMAS Sydney hubiese desaparecido de su vista, han observado un brillante resplandor sobre el horizonte en el punto de desaparición del Sydney. Lo más probable es que los australianos no hayan podido controlar los incendios a bordo y que estos hayan terminado por hacer estallar sus polvorines. 645 marineros han perdido la vida en la explosión. Así, puede decirse que el Kormoran, como El Cid, ha ganado su última batalla después de muerto.
Es lebe Kriegsmarine!
Sieg Heil, Hilfskreuzer Kormoran!
Es lebe Kriegsmarine!
Sieg Heil, Hilfskreuzer Kormoran!
Muy interesante, grata sorpresa encontrar este blog.
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