Camaradas,
Los impresionantes éxitos cosechados por Guderian en las batallas de cerco de Smolensko y Roslavl parecieron avivar el apetito del OKW, que el mismo 15 de agosto, cuando los cañones del 2º Grupo Panzer no se habían enfriado aún, le ordenaron a Guderian para atacar la poderosa fuerza de Timoshenko en el área de Gomel para así aliviar la situación del 2º Ejército de Infantería del Coronel-General Maximilian von Weichs. Guderian debía poner a disposición del 2º Ejército una división Panzer, pero la respuesta de Guderian fue: “Si acaso, habrá que emplear un cuerpo entero. Una división sola no es suficiente para efectuar una operación a tanta distancia.”
El resto es historia. Con la colaboración del 2º Grupo Panzer, el 2º Ejército de Infantería ha terminado de cercar a la totalidad del 21º Ejército Soviético y a buena parte del 5º Ejército Soviético en las inmediaciones de Gomel, Bielorrusia. Finalmente hoy, después de casi dos semanas de combates, el 2º Ejército ha terminado de aniquilar la bolsa de tropas enemigas. Más de 90.000 prisioneros han caído en nuestras manos.
Los cadáveres soviéticos se amontonan en uno de tantos contraataques para romper el cerco que la Wehrmacht ha ahogado en un baño de sangre.
De ese modo, el 15 de agosto el XXIV Cuerpo Panzer del General Freiherr Geyr von Schweppenburg, un resolutivo y sagaz Comandante cuyas divisiones se acababan de distinguir en el cerco de Roslavl y en una operación menor en el área de Kirchev, donde otras tres divisiones soviéticas habían sido aplastadas el día anterior tomando 16.000 prisioneros e ingentes cantidades de material de guerra, se pusieron de nuevo en marcha hacia el sur. En cabeza rodaron la 3ª y la 4ª Divisiones Panzer, seguidas por la 10ª División de Infantería Motorizada. Cuando la fuerza hubiera logrado atravesar con éxito las líneas enemigas, la división en el ala derecha debería golpear en Gomel. Sólo una división –tal y como el OKW había ordenado. Una astuta interpretación de la orden por parte de Guderian.
Muertos o prisioneros, la Unión Soviética muestra un único rostro: el de la derrota.
Sieg Heil!
Por más soldados rusos que mataban o capturaban los alemanes, no podían causarle una derrota total como las que hubo en el frente occidental hacía un año o en los Balcanes hace 5 meses.
ResponderEliminarRecomiendo el libro; Discursos 1939-45 Adolf Hitler de la editorial Avalon. (buenos aires 1999)
ResponderEliminarEn los discursos describe parte de estas victorias y otras acciones militares y políticas que harán al aficionado ver a los alemanes de una forma mas justa.