viernes, 18 de junio de 2010

Conferencia Hitler-Mussolini en Munich - 18/06/1940.

Camaradas,

El día de hoy ha sido testigo del esperado encuentro entre nuestro Führer y el Duce de Italia en Munich. El Führer ha llegado a la ciudad al mediodía en su tren especial. El Gobernador del Reich von Epp le ha dado la bienvenida en la puerta. Después de la revista a la guardia de honor, el coche del Führer le ha llevado a su apartamento en el número 16 de Prinzregentenplatz. Tres horas más tarde, el Führer ha vuelto a la estación para saludar al Duce, cuyo tren ha llegado a la capital Bávara con puntualidad a las 14:58. Ciano ha acompañado al Duce. Prácticamente la misma ceremonia que horas antes había dado la bienvenida al Führer, saluda ahora al Duce. Entonces, los dos líderes se han dirigido en coche al Palacio del Príncipe Carl, donde el Führer se ha despedido de su invitado.

Alemania da la bienvenida al Duce.

El Duce y el Führer juntos a través de Munich.  Fotografía obtenida por Eva Braun.

A las 16 horas, el Duce se ha reunido con su anfitrión a la entrada del Führerbau, donde han celebrado una conferencia en el primer piso del mismo edificio de la Königlicher Platz que fue testigo en 1938 de los acuerdos con Chamberlain.

Conferencia de Munich en septiembre de 1938, el mismo escenario donde el Führer y el Duce se han reunido hoy para tratar la rendición de Francia, que entonces estuvo respresentada por Daladier.

Sobre la reunión en sí, Ciano ha dejado constancia en su diario que el Führer ha hablado “con una cautela y una perspicacia que, después de una victoria así, resultan realmente sorprendentes.” El Führer ha llevado el peso de la conversación, que se ha prolongado durante varias horas.

El Führer ha admitido que, por supuesto, planea desarmar a Francia y presionarla para que ceda a ciertas peticiones alemanas. Lo que sucederá después con Francia todavía está por decidir pero, en cualquier caso, el Führer respetará tanto las posesiones coloniales francesas como la flota francesa, lo cual supone un baldón para las aspiraciones territoriales de Italia pero que debido a la coyuntura política actual y a la necesidad de dejar la puerta abierta para un entendimiento con Gran Bretaña el Duce sabe hacerse cargo. Del mismo modo, Mussolini ha obtenido la seguridad de que el acuerdo de armisticio no entrará en vigor hasta que las negociaciones franco-italianas hayan sido concluidas exitosamente. El Führer ha dejado impresionados a todos los presentes en la conferencia al hablar con gran cautela y comedidamente y no jactarse de la victoria.

Los dos mandatarios tampoco han dejado pasar la oportunidad de hablar de otros asuntos.  Uno de ellos ha sido el "Plan Madagascar", mediante el cual Alemania pretende conceder a los judíos del mundo un territorio paradisiaco para que puedan disfrutar de su propio estado, de su anhelada tierra prometida, y dejen de ser una población errante sin patria.  El territorio de Palestina no es el más propicio para su asentamiento debido a su situación en pleno corazón del mundo árabe.  Quienquiera que cometiera el error de situarlos ahí, por muy dispuestos que estuvieran los hijos de Abraham, cometería un error que muchas generaciones futuras lamentarían.

Después de salir a saludar al público desde el balcón del Führerbau, el Führer ha acompañado al Duce a la entrada principal. Poco después ha estado de nuevo a su lado mientras Mussolini se ha dirigido desde el Palacio Príncipe Carl a la estación ferroviaria de Munich. Unos pocos minutos después de la salida del Duce, el Führer ha subido a su tren especial, que lo ha llevado de vuelta a sus Cuarteles Generales de Guerra en Bruly-le-Pêche. Al llegar a ellos, ha comenzado la redacción de un borrador para el acuerdo de armisticio con Francia.

Es lebe der Führer!
Viva il Duce!

2 comentarios: