La celebración ayer del vigésimo primer aniversario de la fundación del hoy inexistente estado de Checoslovaquia ha dado lugar a que numerosos tabloides se hayan hecho eco de una serie de incidentes en Praga que no podemos calificar menos que de insignificantes. El puñado de agitadores, sin lugar a dudas azuzados y subvencionados por la propaganda inglesa, constituyen una ridícula minoría dentro del territorio de la antigua Checoslovaquia y en pocas horas todo ha vuelto a la normalidad sin mayores consecuencias. Nos consta que los habitantes alemanes del territorio de los Sudetes y los checos del Protectorado de Bohemia y Moravia se sienten plenamente satisfechos de su integración en el Tercer Reich y que trabajan con vigor en su fortalecimiento, contentos de lo mucho que han mejorado sus vidas desde que el falso estado de Checoslovaquia fuera disuelto en virtud de los Acuerdos de Munich.
Propaganda demócratica: esta fotografía de octubre de 1938, tomada cuando las fuerzas alemanas entraron pacíficamente en los Sudetes, rezaba lo siguiente en los medios hostiles al Reich: "La tragedia de esta mujer, incapaz de esconder sus lágrimas mientras saluda por obligación la entrada del triunfante Hitler es la tragedia de millones que han sido ganados al 'hitlerismo' mediante el sempiterno uso de la fuerza bruta."
La verdadera fotografía, sistemáticamente ocultada por los medios plutócratas: ¿Incapaz de esconder su pena o una forma diferente de expresar alegría?
Otra fotografía durante la entrada triunfal de Hitler en Praga el pasado marzo que no admite dudas.
La propaganda de las democracias, tan torpe como acostumbra, no ceja en su pueril empeño de demonizar al Führer y a los alemanes, empleando palabras como “ocupación” e “invasión”, cuando nos consta que los checos son conscientes de que Alemania no los ha invadido, sino que tan sólo se encuentra “protegiendo” temporalmente su integridad territorial, como lo han reconocido y agradecido siempre los checos. Exigimos, por tanto, que cesen las muestras de hostilidad hacia el Reich y la manipulación informativa. Si quieren la guerra, aceptamos la guerra, pero por favor, que sea una guerra limpia.
Es lebe Deutschland!
Esos desagradecidos checos no saben valorar las ventajas de integrarse en el Gran Reich. Habrá que educarlos a base de jarabe de palo jejeje
ResponderEliminarTenemos reservado por ahí a un tal Reinhard Heydrich, un personajillo que se hará famoso por su solidaridad y sus méritos humanitarios en Checoslovaquia y que ya se va abriendo camino en esa pequeña ONG conocida como Schutzstaffel.
ResponderEliminarSaludos.