Camaradas,
A pesar de su entrega y valor, la ofensiva de Primavera con la que Italia pretendía retomar la iniciativa en el frente albanés y expulsar de Albania a los invasores griegos antes de la intervención de la Wehrmacht en los Balcanes, ha quedado detenida.
La segunda ofensiva italiana contra Grecia, un nuevo fracaso.
El 14 de marzo, los italianos lanzaron un nuevo asalto contra la cota 731, la famosa Colina Monasterio. Los griegos a las órdenes del Capitán Koutrides y el Teniente Hatzikyriakos contraatacaron con tal furia que las tropas italianas llamaron a este asalto el “Contrataccato dei Animali” (el Contrataataque de las bestias). Cuando las tropas griegas se quedaron sin municiones, arrojaron sus rifles y atacaron a los italianos empleando sólo sus bayonetas. Poco después llegaron al sector más unidades italianas y griegas, generalizándose el combate cuerpo a cuerpo. Koutrides, que dirigía el asalto, resultó herido tres veces pero no dejó de dar órdenes a sus tropas. Hatzikyriakos perdió la vida durante los enfrentamientos.
Una dantesca imagen del entorno que rodea a la cota 731.
Al día siguiente, los italianos se limitaron a lanzar una serie de ataques nocturnos, que de nuevo volvieron a ser repelidos. El mal tiempo forzó una paralización de la ofensiva.
El 19 de marzo, después de cuatro días de descanso que los dos bandos emplearon en reorganizarse y acumular reservas, volvió el buen tiempo. Los italianos, decididos a asestar el golpe definitivo, lanzaron al asalto a una unidad de élite de la 51ª División de Infantería Siena, los Arditi D’Italia, con el apoyo de tanques, artillería y uno de los ataques aéreos más violentos que Italia ha desatado en el frente albanés en toda la guerra. Las tropas griegas de la cota 731 son cogidas por sorpresa y, a pesar de su preciso fuego de artillería, un tanque italiano junto con algunas tropas de Arditi, consiguen capturar la Colina Monasterio.
Avanti, Arditi!
Las tropas griegas evacuaron sus posiciones ante la presión italiana pero, poco después, los griegos organizaron el contraataque. Una compañía griega con tan sólo 20 balas por cabeza atacó con furia a los italianos, agotando rápidamente sus municiones y haciendo uso de las bayonetas. Con increíble vehemencia, un oficial griego se encaramó a un tanque italiano con dos soldados e intentó destruirlos arrojando un par de granadas por las escotillas. Dos horas después, los griegos lanzaron a la batalla al resto de sus unidados, golpeando con dureza a los Arditi. Una vez más, los combates a punta de bayoneta estuvieron a la orden del día. De los 300 italianos que lograron encaramarse a la cota 731, tan sólo sobrevivieron 4. Por su parte, los griegos perdieron 150 hombres.
Cadáveres italianos en las montañas de Albania.
La cota 731 tras la batalla.
Hace dos días, el 21 de marzo, el Duce regresó en avión a Italia después de permanecer varias semanas en el frente albanés para galvanizar a las tropas con su presencia. La marcha de Mussolini es el signo más claro de que los italianos han dado por fracasada su ofensiva. De hecho, el mismo día, un grupo de italianos con banderas blancas y escoltados por sacerdotes católicos se acercaron a la ladera de la Colina Monasterio y solicitaron una tregua para enterrar a sus muertos. El campo de batalla ofrecía un espectáculo dantesco, más allá de los límites de la imaginación humana. Había miembros humanos esparcidos por todos lados, armas, rocas, árboles destartalados. El hedor putrefacto era insoportable para ambos bandos. Aún así, los griegos no aceptaron la tregua, dado que los emisarios italianos tan sólo estaban autorizados a conceder una tregua en el sector, no una tregua global en todo el frente tal y como solicitaban los griegos.
El 22 de marzo, ayer, los italianos lanzaron el último ataque a gran escala contra la Montaña Goliko situada detrás de la cota 731 y defendida por la 2ª División de Infantería Atenas. Los italianos concentraron el esfuerzo de su asalto sobre la cota 1615 y sobre una colina llamada Donti (Diente). Durante la mañana, 2.000 proyectiles de artillería golpearon la Colina Donti,
Al ataque en las montañas de Albania.
El último intento se ha producido al caer la noche de hoy, día 23, cuando un ataque nocturno italiano contra el frente Bubesi ha conseguido atravesar dos veces las defensas griegas, pero las dos veces los italianos han sido rechazados con granadas y bayonetas durante furiosos contraataques.
Éste ha sido el último episodio significativo de la fracasada ofensiva de primavera. Nunca en las dos semanas de combates se ha encontrado la línea griega en peligro de ser quebrada. El honor de Italia, no obstante, ha quedado a salvo. Los soldados del Duce han demostrado al mundo su bravura y su determinación a pesar de las adversidades.
Viva il Duce!
Viva l’Italia!
Mi padre participo en ese combate, tiene una medalla al valor militar, que conservo junto con fotos originales de esta batalla,y tengo fresco en mi mente sus relatos,sin banderias fue un soldado con mucho coraje, pertenesia a los ARDITI su apellido (ARGENIO )
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