Camaradas,
Mientras los Estados Unidos deciden enviar al diplomático Sumner Welles a Europa a modo de ingenuo “emisario de paz”, la noticia vuelve a estar de nuevo en Polonia. En efecto, la Oficina de Asuntos Extranjeros Alemana ha publicado a través de la editorial Volk und Reich Verlag de Berlin un informe oficial alemán sobre los asesinatos de los que fue víctima la población alemana en Polonia bajo el título “Atrocidades polacas contra la minoría alemana”.
Los polacos alegaron que miembros de las minorías alemanas emboscados "atacaron columnas del ejército polaco en retirada". Pues bien, aquí se ve una muestra de esos peligrosos "guerrilleros" brutalmente asesinados. Se advierte a los lectores que las fotografías de este artículo pueden herir su sensibilidad.
Casualmente la prensa franco-inglesa había tomado de nuevo desde hacía una semana el tema polaco, no porque creyera que los ríos puedan volver sus aguas hacia atrás, sino porque tal vez quieran dar como principal medida de política a los hombres de Estado polaco, emigrados en el país de las libertades, la sensación de que siguen apoyando su causa. Al fin y al cabo no podemos dejar de recordar que según la versión de los aliados el banderín de “enganche” para la guerra había sido siempre la cuestión polaca.
Civiles alemanes, entre ellos niños, ejecutados con las manos atadas a la espalda. "Polonia quiere la guerra con Alemania y Alemania no podrá evitarlo incluso si lo quiere". Mariscal Polaco Rydz-Smigly al Daily Mail, 6 de Agosto de 1939.
Aquí yacen los cuerpos del jardinero Friedrich Beyer, sus dos hijos, Kurt and Heinz (de 10 y 18 años de edad), y Thiele, el ayudante de jardinero, de Gr. Bartelsee, Distrito de Bromberg.
La actitud de la propaganda aliada en torno a este capítulo aún oscuro y patético de nuestros días no puede ser más deplorable. Así, mientras los relatos auténticos y probados por las delegaciones internacionales acusan una grave estadística de los asesinatos ocurridos durante el mes de septiembre, los aliados intentan hacer olvidar con estadísticas apócrifas y viejo material aprovechado cínicamente la realidad de lo sucedido en Polonia, cuyas pruebas documentales divulga el informe alemán y obran en los archivos del Ministerio de Asuntos Exteriores para horror de toda la humanidad.
Cadáveres de la minoría alemana en Polonia terriblemente mutilados y vejados.
Que el Sarajevo de este conflicto hayan sido Polonia o Danzig no deja de ser más que un cuento de niños. El auténtico Sarajevo de esta guerra ha sido, y digámoslo bien alto, el dinero, el comercio y el miedo a que una nueva potencia dispute la competencia a los que han venido dominando el globo. En resumidas cuentas: el culpable de esta guerra ha sido el capitalismo.
Es lebe Nationalsozialismus!
Y la verdad permanecera oculta para que no descubran quienes fueron los que obraron deacuerdo a sus interes, que manipularon y retorcieron sin escrupulos.
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