viernes, 10 de diciembre de 2010

Operación Atila - 10/12/1940.

Camaradas,

El Generalísimo Franco, Jefe de Estado de España, le ha comunicado al Reich su decisión final: España no entrará en la guerra. El Führer, comprensivo con su buen amigo español, cuyo país acaba de pasar el amargo trago de una guerra civil de tres años, ha decidido no obstante asegurar el flanco sur de Europa mediante la emisión hoy de la Directiva de Guerra Número 19 en la que trata con detalle la ocupación militar del sur de Francia. El nombre clave de la maniobra es Operación Atila, en referencia al Rey de los Hunos Atila llamado el “azote de Dios” y su campaña en tierras galas el año 451.

Operación Atila: ocupación de la zona no ocupada de Francia.

El texto de la Directiva Número 19 es el siguiente:

1. En el caso de que tenga lugar un movimiento secesionista en las porciones del Imperio Colonial francés que ahora controla el General Weygand, es necesario llevar a cabo los debidos preparativos para la rápida ocupación del área no ocupada de la Francia metropolitana (Operación Atila). Al mismo tiempo será necesario asegurar la Flota francesa y las porciones de la Fuerza Aérea francesa que se encuentren en los aeropuertos, o al menos impedir su deserción al bando enemigo.

Los preparativos deben ser camuflados para impedir alarmar a los franceses, en interés tanto militar como político,

2. La irrupción deberá, dado el caso, tener lugar de modo que:
a) Potentes grupos motorizados, cuya protección aérea adecuada debe ser asegurada, atraviesen la línea del Garoña o el Rhone lo más rápido posible hasta el Mediterráneo, tomen posesión cuanto antes de los puertos (sobre todo, el importante puerto naval de Tolón) y dejen a Francia aislada del mar.
b) Las unidades estacionadas en la línea de demarcación se adentren a lo largo de todo el frente.
El tiempo transcurrido entre la orden de ejecución de la operación y la entrada de las tropas debe ser lo más corto posible. Por esta razón unidades individuales deberían incluso ahora moverse más cerca, pero sin que resulte aparente que vayan a ser empleadas.

Movimientos militares planeados.

Es improbable que las fuerzas armadas francesas opongan una firme resistencia a la invasión. Si se ofreciera resistencia de manera local, será aplastada implacablemente. Para este propósito, así como para su empleo contra posibles puntos problemáticos, deberán estar disponibles formaciones de bombarderos de la Luftwaffe, principalmente bombarderos en picado.

3. En el caso de todas las unidades de la flota, deberán observarse su atracadero, condición, oportunidad de captura, etc, para preparar las medidas en contra de la salida de la flota francesa y su deserción al enemigo. El Comandante en Jefe de la Marina emitirá, junto con el Departamento de Inteligencia extranjera, las órdenes oportunas, aprovechándose de las oportunidades que pueda ofrecer la Comisión de Armisticio.

Los Comandantes en Jefe de la Kriegsmarine y de la Luftwaffe examinarán cómo, en cooperación con las porciones invasoras del Ejército, pueden hacer que la flota francesa caiga en sus manos de la mejor manera posible. Tomarán en consideración en particular:
- Bloqueo de la boca de los puertos (sobre todo, Tolón);
- Operaciones aerotransportadas;
- Actos de sabotaje;
- Ataques aéreos y submarinos de los buques que escapen.

Flota francesa en el puerto de Tolón.

El Comandante en Jefe de la Kriegsmarine dará una opinión sobre si y hasta qué punto las partes de la flota francesa serán retiradas a cambio de una liberalización de los términos del Tratado de Armisticio.
Me reservo la decisión sobre la manera de implementarlo.
La acción ofensiva será ordenada sólo si las fuerzas armadas francesas ofrecen resistencia o partes de la flota salen de los puertos a pesar de las contraórdenes alemanas.

4. La captura de los aeropuertos franceses y de las unidades de la Fuerza Aérea que se encuentren ahí será acordada directamente entre la Luftwaffe y el Heer. Otras posibilidades (por ejemplo, aterrizajes de tropas aerotransportadas) serán tenidas en cuenta.

5. Los Comandantes en Jefe me informarán – en el caso del Heer ya lo ha hecho- sobre sus intenciones para la operación Atila (por escrito a través del Alto Mando de la Wehrmacht). Al mismo tiempo, el periodo de tiempo requerido entre la orden y las propias medidas será indicado.

6. Los preparativos para la Operación Atila requieren el más alto secreto. Los italianos no deben recibir información de ningún tipo sobre los preparativos y las intenciones.

Adolf Hitler

Führer befehl, wir folgen!

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